los pocos peces escasos en el cemento del sueño
es como si estuvieramos contemplando la invenciòn del destierro
llevo manos al galope verticales y hùmedas para negar el armònico desarticulado incendio
Despuès de algunas copas invertidas con cabellos de metal empañado
he dicho que no desde el abrazo y un latido en una caja se destruye sobornado
por la sùplica de guitarras nunca angèlicas.
Me desvanezco.
Desaparezco de mì con el parto de las venas ausentes
no existo en los pàjaros sùbitos, tampoco en el rìo
ni en las diestras caricias de la sombra feliz del adiòs permanente.
Soy la solìsima hendidura
de los lìmites ardientes
la sangre que invade el parto doloroso del destino con su fina sombra de espejos
cabezas que estallan sobre el mar que se contempla a sì mismo.
El cansancio parte de la sal.
La puerta entornada escupe labios y mejillas apagadas.
No regreso
El aire estremecido de la mùsica apaga el nombre de tus ojos
de Laura Inés Martínez Coronel.
Renasço e volto
é um parto às avessas
todo o sangue que derramastes
todas as vísceras que vomitastes
todos os teus sonhos em vão
reconstituem-me, parte de ti
retomo a vida em teu lugar
para enaltecer-te e reviver
o nosso amor.
de Luiz Fernando Gaffrée Thomspon
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